'Hey Jude...Beatles ???', no, futbolista total. Ha nacido una nueva conexión en el Real Madrid. Vinicius Jr. y Jude Bellingham ya hacen de las suyas juntos, son las dos grandes estrellas de este equipo. Vinicius ha ido creciendo en el equipo, con un desempeño sobresaliente en las últimas dos temporadas, hasta coger el '7' de Cristiano Ronaldo. Bellingham, fichado este verano, ha caído de pie en el Madrid con el '5' de Zinedine Zidane a la espalda. Entre ambos reina el buen rollo. Vinicius, tres años mayor que Bellingham, ha recibido de la mejor manera a Jude, igual que el resto de un vestuario donde los jóvenes (también Valverde, Rodrygo, Camavinga, Tchouaméni...) han ido ganando peso progresivamente. Sin Karim Benzema, el brasileño ha encontrado en el británico el socio que necesitaba.
Una nueva actuación sobresaliente que pone en relevancia el gran fichaje que ha hecho el conjunto blanco este verano. Apenas nueve partidos le han bastado para consolidarse como uno de los jugadores más desequilibrantes del Real Madrid y de Europa. Además, su gol maradoniano frente al Nápoles puso de manifiesto todas sus características. Potencia, calidad, físico, inteligencia y acierto goleador. Todas ellas imprescindibles para convertirse en un jugador total en estos primeros partidos de la temporada.
Bellingham se convirtió en el jugador que más peligro creó frente al Nápoles. Una y otra vez atemorizó a sus rivales gracias a su inteligencia sobre el césped. Daba igual si era de cara a portería o con él terminando la jugada. Estaba en todos los lados y eso lo agradecía el Real Madrid. Él fue el generador de la primera ocasión clara del partido. Dejó prácticamente solo a Rodrygo frente a Meret y ni siquiera se había cumplido el minuto 5 de partido. Era el preludio de lo que estaba por llegar. Él fue el artífice de que el conjunto blanco remontase el tanto inicial de Ostigard. Primero demostró su inteligencia a la hora de leer las jugadas para robar un balón clave en la salida del Nápoles. Se inmiscuyó en la acción para hacerse con la posesión y darle una magnífica asistencia a Vinicius para poner el empate en el marcador cerca del minuto 30.
Superada la media hora de juego, Bellingham dejó la jugada del partido. Recibió de Camavinga cerca del círculo central y enfiló hacia la portería de Meret sin que nadie le pudiese parar hasta que el balón entró en la meta rival. Era una mezcla de potencia y suavidad, como si tuviese la fuerza de un búfalo y la delicadeza de una mariposa. El espíritu de Diego Armando Maradona le poseyó para dejar un gol de bandera. También tuvo su cuota de protagonismo en la segunda parte. Cuando el Real Madrid más golpeado estaba, él era de los pocos que tenía clarividencia sobre el terreno de juego, de los que generaba. Casi hizo el tercero con un cabezazo que se marchó por escasos milímetros. Finalmente, el gol de Valverde le dio el triunfo a los blancos con Bellingham como capitán general.
El arranque de temporada de Bellingham ha sido estelar.Tal ha sido su idilio con el conjunto blanco que ha conseguido sumar unos números prácticamente inalcanzables desde que llegó. Ocho goles y tres asistencias en nueve partidos. Unas cifras, en el aspecto anotador, que solo supera Cristiano Ronaldo con el Real Madrid. El portugués logró 9 tantos en nueve partidos. Por lo tanto, Bellingham se ha vuelto en un futbolista total desde que aterrizase en el Real Madrid. Más allá de su talento o su olfato goleador, uno de los aspectos que más sorprende es su madurez.
El propio Carlo Ancelotti lo dejó claro en la rueda de prensa al finalizar el partido: 'Lo que me sorprende de él es que tiene 20 años, a veces parece que tiene 30 años por su carácter y su personalidad. Siempre está bien focalizado en el partido y sabe lo que tiene que hacer, esto es raro en un jugador de sólo 20 años. Luego toda la calidad que tiene, la fuerza física, la habilidad, obviamente sorprende un poco a todos'.
En definitiva, Bellingham se ha convertido en el gran protagonista del Real Madrid en este arranque de temporada. Su momento culmen ha llegado con su gol maradoniano frente al Nápoles, pero está claro que puede aportar todavía mucho más