22 de septiembre de 2022

'Tchouaméni supera a Casemiro'

  

  Aurélien Djani 'Tchouaméni'
es la nueva gran contratación del R. Madrid, por un valor que asciende a 80 millones de euros más 20 en variables. Un jugador procedente del Mónaco, equipo donde explotaron futbolistas como Kylian Mbappé, Evra, e incluso Thierry Henry. A sus 22 años, 'Tchouaméni', como ya pasó también con esos mencionados jugadores, se convirtió en el objetivo de los principales clubes de Europa, ganando finalmente el pulso por su fichaje el vigente campeón de la Champions League. El centrocampista francés ha elevado espectacularmente su valor en apenas dos temporadas, ya que fue firmado desde el Girondins de Burdeos en enero de 2020 por una cifra cercana a los 18 millones de euros. 'Aurélien es un jugador de primera clase mundial. Tiene un enorme potencial y mucho autocontrol. Los jugadores jóvenes también están saliendo adelante y eso es genial', ha destacado sobre él Deschamps, seleccionador de Francia.

 El diestro 'Tchouaméni' puede desarrollar tanto la función de centrocampista defensivo como la de centrocampista con mentalidad ofensiva. Esta última posición le permite superar líneas rivales desde el centro del campo con pases entre líneas o por encima de los defensas rivales. También destaca por su buen desplazamiento en largo para cambiar la orientación del juego. Un rango de pases con el que sorprende en muchas ocasiones a las líneas rivales para encontrar a compañeros cercanos o en territorio más avanzado, como el pase a Rodrygo frente al Atl d Madrid. A diferencia de sus precisos cambios de juego sobre un compañero que está estático o en una posición fija, como también en los momentos que juega a los pies de un compañero; sus desplazamientos en largo a través del centro del campo pueden no alcanzar el objetivo deseado si no son ejecutados con la sincronización correcta en relación a los movimientos de su compañero o con la velocidad necesaria.No obstante, es capaz de girar el juego de un lado a otro a través del movimiento de su cuerpo para encontrar a sus compañeros en profundidad por las bandas. Lo hace con una sincronización admirable para aprovechar los espacios entre los centrocampistas rivales. Estas acciones las ejecuta con regularidad cuando adopta posiciones más retrasadas para ofrecerse como enlace con la defensa.

 La marcha del brasileño al Manchester United supuso un duro golpe en todas las patas del club. Si bien solo quedan palabras de agradecimiento para un número ‘14’ que conquistó el mundo con el R. Madrid desde el 2013, por la capital española se preguntaban si 'Tchouaméni' sería capaz de asumir a corto plazo el reto de sustituir a quien para muchos era el equilibrio del vestuario y de la medular blanca. Pocas dudas quedan ahora.Verle en pretemporada confirmaba que estábamos ante un portento físico capaz de liderar los planes de  Ancelotti para el futuro R. Madrid, pero 'Tchouaméni' ha ido incluso más allá. Su primer encuentro marcado en el calendario de la afición llegó en un contexto más que enrarecido, con un ambiente hostil para debutar en el derbi y 'Tchouaméni' no hizo otra cosa que lucirse. En Valdebebas se frotan las manos.

 No solo fue su capacidad de robar balones, de dar equilibrio a un centro del campo donde Modric y Kroos se sienten cada vez más respaldados por su presencia, o el hecho de apenas haber cometido errores en un encuentro para auténticos guerreros. 'Tchouaméni' superó todas las expectativas en un derbi donde por medio de inteligencia y músculo, demostró que la operación que le trajo al Bernabéu puede suponer una auténtica ‘ganga’ en unos años. El partidazo absoluto del galo frente al Atl. d Madrid, con una asistencia, propia del número ‘10’ que tiene al lado, y una serenidad que hace dudar que tenga apenas 22 años sobre sus piernas. El cielo es el límite y el camino será más que largo si, pero nadie duda que  'Tchouaméni' se ha ganado en apenas cuatro semanas, ser considerado ya como el 'digno heredero de Casemiro'.