Francisco Román Alarcón, más conocido como 'Isco', se ha convertido en la nueva figura del Real Madrid y de la selección Española.
El fútbol es talento, improvisación, sorpresa y magia. El jugador que reúna todas estas cualidades, podríamos decir que es un auténtico mago del balón. Un claro ejemplo de este tipo de futbolista es el joven jugador del Real Madrid: 'Isco'.
'Isco' es un jugador distinto, capaz de hacer cosas que solo tienen
cabida en la mente de un auténtico genio del fútbol. Cada partido en el
que 'Isco' está presente sobre el césped, nos deja detalles de calidad,
propios de aquel que posee una técnica exquisita. El público del Bernabéu disfruta con el fútbol del malagueño, y éste corresponde a su vez con jugadas, regates y goles extraordinarios.
El único pero que se le podría poner a 'Isco' desde su llegada al club
blanco, quizás sea la falta de actitud defensiva, tan importante en un
equipo de este nivel y que basa su juego en la rapidez de las
transiciones defensa-ataque. Este año, el comportamiento de 'Isco', en cuanto a actitud defensiva, ha cambiado de manera considerable. Ahora vemos cómo el jugador es uno de los primeros en iniciar la
presión sobre la salida de balón del equipo rival, de ayudar a sus
compañeros en las labores defensivas en propio campo, y lo que es más
sorprendente, de luchar cada balón como si fuera el último. Prueba de
ello fue el tercer gol anotado por el Real Madrid en el pasado 'clásico',
el cual nace de un alarde de fe del mismo 'Isco'.
Gran culpa de este cambio en la forma de jugar del futbolista la tiene el míster del Real Madrid. Ancelotti ha sabido mostrarle a 'Isco' que no solo hace falta la magia dentro del terreno de juego, sino que también hacen falta trabajo y esfuerzo defensivo. Todo apunta a que 'Isco' ha aprendido la lección del míster, y parece ser que no solo estamos ante un mago del balón, también tenemos delante a todo un currante del fútbol.