El Real Madrid firma una victoria convincente sobre el Barcelona (3-1). Neymar abrió el marcador en el minuto 4, pero el equipo blanco consiguió dar la vuelta. CR7 empató de penalti antes del descanso, Pepe marcó de cabeza en la segunda parte y Karim Benzema puso la sentencia, el Real Madrid le dió hoy al Barsa un ´baño` física y tacticamente.
Decía
Luis Enrique el pasado martes que en el
Bernabéu es donde más
orgullo se sentía un culé. No sentirán lo mismo los
aficionados azulgranas del planeta ante el esperpento del asturiano en
el coliseo blanco, una vacilada, esa de jugar nueve contra once con el R.Madrid como rival, al dejar en el banquillo a
Rakitic y Jordi Alba, para meter a L.Suárez y Mathieu en el once titular. Fontanería low cost.
El que sí sacó su nivel
´top` fue Marcelo. El brasileño no se cansó de
poner coloradado a su compatriota
Alves, en otro ejercicio de impotencia
del otrora mejor lateral derecho del mundo. Precisamente desde esa zona
llegó el empate. El ´
12` blanco puso un centro rasito tras llegar a
línea de fondo y
Piqué tiró de waterpolo para interceptarlo. Mano clara.
CR7 anotaba de penalti y cerraba el récord de
C.Bravo en 754 minutos. Tablas y justicia antes del descanso.
La segunda mitad vulgarizó un primer acto digno del
Barça y destapó al
R.Madrid eléctrico que tanto
´pone` al
Bernabéu: poderoso por el aire y
matador al contragolpe.
Pepe, adelantaría a los blancos tras
rematar un saque de esquina.
Piqué,
Mathieu y
Mascherano mientras tanto
jugaban al
´Churro Pico Terna`.
Iniesta y
Mascherano se unieron a ellos,
pero éstos disfrazados de
´mujer barbuda`. Entre ambos regalaron a
Isco,
CR7,
James y
Benzema un cuatro contra uno que finalizó
el francés con un disparo seco a la base del poste izquierdo de Bravo.
De ahí al final del partido, la precipitación y la confianza de los de
Ancelotti en la media docena de contras que tuvieron evitaron una
goleada histórica. En
R.Madrid, como en
París, el
Barça salió desnudo. Dos
rivales serios, dos derrotas claras. El proyecto de
Luis Enrique tiene
más goteras que juego.
Messi se marcha del Bernabéu sin poder igualar el
récord goleador en la Liga del mítico Telmo Zarra. El que
sí ha acabado con la imbatibilidad de Bravo ha sido CR7, que ha marcado de penalti en el minuto 34. Después de 754 minutos invicto, el guardameta azulgrana ha recibido su primer gol en el campeonato.
